He vuelto de un viaje lejano
donde creí que no iba a pensarte
sin embargo estabas conmigo
en cada instante.
Te recordé en una banca de madera
donde nunca conversamos
ni menos pude alcanzar con un beso
hebra alguna de la seda de tu pelo.
Te sentí en una almohada desconocida
sin tener la funda verde
ni los pliegues que nunca hiciste
al sentirme.
Y besé el vaso donde tantas veces
creí que me tomaste
como el vino que nunca pruebas
ni el agua pura que me entregas
en la cuenca de tu sexo impaciente.
Mil gotas mías se secaron en tu boca
mil gotas tuyas se esparcieron
en mis dedos
mil rocíos en dos pétalos rojos
que florecieron en tu monte
cuando acaso te acordaste
que una vez me amaste
de tanto porfiar tercamente
en tu amado sexo.
© Gabriel
2 comentarios:
Me recordó a "Lucía", la canción de Serrat: "No hay nada más bello que lo que nunca he tenido..." y a la de Sabina, "No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió..."
Hermoso trabajo.
Mis últimos poemas son de amor; sé que son los que más te gustan, date una vueltita por el blog cuando puedas.
Un abrazo.
"Nada mas amado que lo que perdí..." creo que así sigue la letra de la hermosa canción de Serrat.
Siempre voy por tu bello blog Raquel. Me encantan tus poemas y las canciones que pones.
Un beso!
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